Como enseñar a aprender "Química"

Como enseñar a aprender “QUÍMICA”

Autora: María Elena Aquino Parra.

15 de Agosto, 2008

Uno de los capítulos más apasionantes de la evolución del pensamiento humano es la química, que avanzó cuando se le aplicó el método científico al comportamiento de la materia. Desde hace mucho tiempo, el ser humano aceptó que todas las cosas que existían estaban constituidas de sustancias a las que, en forma general, les dio el nombre de materia. A medida que avanzaban los siglos, muchas personas se interesaron en la búsqueda de respuestas a los fenómenos naturales y de un “principio tangible” que pudiera ser el origen material de todo lo que existía. Así, desde el siglo XVIII, la química comenzó a desarrollarse como una verdadera ciencia, y da como resultado unos paradigmas generales: la teoría atómica, la teoría de Dalton, las primeras bases de la nomenclatura química y el establecimiento del principio de Avogadro, el cual creó las bases para la teoría molecular y el establecimiento de los pesos atómicos y moleculares.

También es conveniente mencionar que hay una enorme cantidad de temas, por demás interesantes, que es conveniente aprender. Por ejemplo: la ropa que vistes, el piso sobre el que te encuentras, las palomitas de maíz, el esmog y los IMECAS con los que se mide la última medicina que tomaste, las pinturas de Bonampak, el papel sobre el que están escritas las letras, Petróleos Mexicanos, el aparato de música, los discos, las cintas y los instrumentos musicales, los superconductores, los anticonceptivos, la resonancia magnética nuclear, las emociones, el miedo y el dolor, la posibilidad de que entiendas esto, entre otros muchos asuntos, tienen que ver con la Ciencia Química. Si sabes un poco de química, podrás reconocer que lo sintético no necesariamente es malo y que lo natural no necesariamente es bueno, y que ambos son también química, de ahí la importancia de su estudio.

El eje central de la estructura de mi propuesta será a base de Unidades Didácticas; del modo siguiente:

1. Seleccionar un tema integrador con un problema que necesita resolverse, asegurando en su selección que sea de interés de la mayor parte de los estudiantes si puede ser consensuado mejor. La enseñanza a través de la resolución de problemas es actualmente el método más invocado para poner en práctica el principio general de aprendizaje activo. Lo que en el fondo se persigue con ella es transmitir en lo posible de una manera sistemática los procesos de pensamiento eficaces en la resolución de verdaderos problemas de la vida real.

2. Se deben tener en cuenta siete principios básicos para tener una primera aproximación: validez, comprensión, variedad, conveniencia, estructura (con los conceptos relacionados de equilibrio, continuidad, acumulación, repetición y aprendizajes múltiples), relevancia y participación de los alumnos.

2.1 Los criterios descritos, traducidos de manera práctica consideran de manera puntual que:

• Sea del interés del alumno.

• Se relacione con la vida cotidiana.

• A partir de él se puedan trabajar diversos contenidos de una misma materia.

• Con base en él se puedan trabajar contenidos de más de una asignatura correlacionados.

• Se relacione con el conocimiento científico – técnico.

• Pueda vincularse con la vida cotidiana del alumno, en el contexto estatal, regional, nacional y mundial.

• Sea capaz de crear perspectivas que le modifiquen sus saberes previos y le amplíen sus horizontes.

3. La Unidad Didáctica será un conjunto de actividades, organizadas en tres bloques: apertura, desarrollo y cierre. Las actividades de apertura son aquellas, a partir de las cuales es posible identificar y recuperar las experiencias, los saberes, las preconcepciones y los conocimientos previos de los alumnos. A partir de tal identificación y recuperación, se realizan las actividades de desarrollo mediante las cuales se introducen nuevos conocimientos científico-técnicos para relacionarlos con los identificados y recuperarlos en las actividades de apertura. Las actividades de cierre son aquellas que permiten al educando hacer una síntesis de las actividades de apertura y de desarrollo, síntesis entendida como aquella que incluye los conceptos fundamentales y subsidiarios, así como las categorías: espacio, tiempo, materia, energía y diversidad construidas durante estas actividades. Entonces, al realizar una secuencia didáctica se desarrolla la dimensión fáctica o de conocimiento para introducir al educando al mundo científico-técnico, al mundo de los procedimientos para desarrollar la dimensión procedimental o metodológica y al mundo de lo axiológico para desarrollar la dimensión valoral o actitudinal. También se desarrollan los Valores Universales: libertad, justicia y solidaridad.

Se conformarán grupos de trabajo a partir de los resultados que se obtengan de aplicar la técnica del Sociograma a fin de lograr una integración mas adecuada de los distintos grupos de trabajo para la mejor obtención de los resultados esperados.

Se usarán las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. En algunas actividades se hará uso de las Simulaciones ya que este tipo de herramienta favorece metodologías activas de aprendizaje cooperativo e individualizado, a la vez que facilita la atención a la diversidad. También los blogs y algunas Web Quests.

La evaluación de las actividades se hará considerando el dominio de las competencias genéricas que los jóvenes deberán ir adquiriendo para completar el perfil de egreso del nuevo bachiller.

Esta propuesta propone en varias de las actividades, conducir el aprendizaje comparándolo con un juego éste generalmente gusta a todos; así se puede despertar el amor por el fascinante y divertido mundo de la Química como lo enuncia José Antonio Chamizo en su libro “cómo acercarse a la Química” .

Cuáles son las ventajas de este tipo de enseñanza? Por qué esforzarse para conseguir tales objetivos? He aquí unas cuantas razones interesantes:

- porque es lo mejor que podemos proporcionar a nuestros jóvenes: capacidad autónoma para resolver sus propios problemas

- porque el mundo evoluciona muy rápidamente: los procesos efectivos de adaptación a los cambios de nuestra ciencia y de nuestra cultura no se hacen obsoletos

- porque el trabajo se puede hacer atrayente, divertido, satisfactorio, autorrealizador y creativo

- porque muchos de los hábitos que así se consolidan tienen un valor universal, no limitado al mundo de la química

- porque es aplicable a todas las edades.